Ante esta situación la comunidad médica ha señalado que el ejercicio y una dieta rica en frutas y verduras son factores que reducen considerablemente el riesgo de sufrir ataque cardíaco.
¿Pero que pensarías que se ha creado una vacuna capaz de evitar ataques cardíacos? Sin duda sería una gran noticia, aunque muchos sólo la considerarían una invención que jamás se alcanzaría. Afortunadamente, investigadores de la Universidad de Lund, Suecia, lograron crear una vacuna capaz de eliminar la grasa que existe en las arterias, reduciendo el riesgo de que el paciente desarrolle ataque cardíaco.
La vacuna es un medicamento que tiene anticuerpos diseñados para eliminar la grasa que existe en las arterias, reduciendo el riesgo de que se desarrolle la ateroesclerosis, enfermedad que provoca el estrechamiento y reducción del flujo de oxigeno al corazón, desencadenando el ataque cardíaco.
Para comprobar la eficacia de la vacuna, se probó en un grupo de ratones que tenían altos índices de grasa en las arterías. Cuando se les inyectó la vacuna se encontró que el fármaco logró reducir entre un 60 y 70 por ciento la grasa acumulada en las arterias de los animales.
La vacuna logró reducir entre un 60 y 70 por ciento la grasa acumulada en las arterias
El profesor Jan Nilsson, encargado de dirigir el estudio, indica que es importante realizar pruebas en humanos para corroborar la eficacia de la vacuna para la prevención de ataques cardíacos.
El profesor apunta que en la actualidad los tratamientos que existen para prevenir enfermedad cardíaca “sólo reducen en 40% el riesgo de que un paciente desarrolle enfermedades cardiovasculares".
Considera que “las personas que están en riesgo de infarto al miocardio probablemente serán los primeros candidatos para probar este nuevo enfoque inmunológico. Como estos tratamientos son medidas preventivas totalmente diferentes, podrán ser utilizadas junto con las actuales terapias".
Además de combatir la ateroesclerosis, los investigadores tienen el objetivo de crear otra vacuna que sea capaz de eliminar el colesterol malo (lipoproteína de baja densidad o LDL), el cual se aloja en las arterias y propicia la aparición de enfermedad cardiaca.
Nilsson, al respecto, señala que "el fundamento es que ya que el LDL juega un papel muy importante en el desarrollo de placas ateroescleróticas y los dañinos procesos inflamatorios, combatiendo directamente el LDL deberá evitar la formación de placas y reducir la inflamación".
Sin duda, los resultados de la investigación son de gran relevancia para el cuidado del corazón. Aunque es necesaria realizar más estudios para comprobar su eficacia en los próximos años posiblemente se comercialice este fármaco, ya sea en vacuna o espray.
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